Cinco Verdades Sobre la Profecía Bíblica
Dios sigue cumpliendo las promesas y predicciones de las Sagradas Escrituras
El material profético de la Biblia se distingue de cualquier otro libro del mundo. Alrededor del 30 % de la Biblia contiene profecías, y la mayoría de ellas se refieren al final de los tiempos.
A veces la gente me pregunta por qué la Biblia habla tanto del fin de los tiempos, o de la última generación de la humanidad. Una de las principales razones es que hay más personas vivas ahora mismo, en la tierra, que las que han vivido en todos los tiempos de la historia del mundo.
En el siglo I, cuando se escribió el Nuevo Testamento y en la época de la crucifixión y resurrección de Cristo, probablemente solo había unas 200 millones de personas en el mundo.
El mundo alcanzó una población de mil millones de personas en 1804. Tuvo que pasar más de un siglo (hasta 1927) para que esa población se duplicara hasta los 2 mil millones.
Según las proyecciones de las Naciones Unidas, la población mundial alcanzará los 8 mil millones de habitantes el próximo año.
Tal vez la Biblia habla tanto de esta generación porque no es simplemente la generación final, sino la más poblada y Él quiere instruir y consolar a tantos de sus hijos como sea posible.
También creo que hay otra razón importante. Estos son tiempos muy importantes, y los últimos días serán los más severos de la historia de la humanidad. Pero no tome mis palabras como un hecho. Preste atención a lo que dijo Jesús:
"Porque entonces habrá gran tribulación como no ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni habrá jamás. 22 Si aquellos días no fueren acortados, no se salvaría nadie; pero por causa de los escogidos, aquellos días serán acortados". -Mateo 24:21-22
Por nuestro bien, Dios nos ha dado la profecía del fin de los tiempos para que podamos estar preparados para lo que viene. Quiere que tengamos esperanza y paz en medio de toda la confusión.
Éstas son otras cinco verdades sobre la profecía bíblica.
1. El único que puede predecir el futuro con absoluta certeza es Él, que lo controla.
Si no es Dios mismo, entonces esta verdad corresponde a cualquier representante directo de Aquel que controla el futuro. Dado que Dios controla el futuro, los mensajes de Dios sobre el futuro son nuestra única fuente fiable de verdad sobre él.
El profeta Isaías lo expresó así:
"El SEÑOR de los Ejércitos ha jurado diciendo:
“Ciertamente será como lo he pensado,
y se realizará como lo he decidido,"
- Isaías 14:24.
2. Dios nos da la profecía para advertir a los infieles y consolar a los creyentes.
¿Cómo responder cuando se escucha las profecías de la Biblia? Si le hacen temer, tal vez no esté preparado para el regreso del Señor. Tal vez deba hacer algunos cambios en su vida.
Pero, ¿le dan esperanzas? Al comprender de manera adecuada las profecías bíblicas, se pierde todo el temor y el miedo al final y, en cambio, se espera con ansias. Quiero que entienda la profecía del fin de los tiempos para que se consuele y pueda contextualizar los eventos que ocurren en el mundo.
La idea de la esperanza se transmite en toda la Biblia, pero Jesús nos da lo que se llama "una esperanza viva" en 1 Pedro:
Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, quien según su grande misericordia nos ha hecho nacer de nuevo para una esperanza viva por medio de la resurrección de Jesucristo de entre los muertos; 4 para una herencia incorruptible, incontaminable e inmarchitable reservada en los cielos para ustedes, 5 que son guardados por el poder de Dios mediante la fe para la salvación preparada para ser revelada en el tiempo final. - 1 Pedro 1:3-5
3. La profecía nos da la seguridad de que toda la Biblia es verdadera.
La Biblia dice la verdad sobre el futuro. ¿Cómo lo sabemos? Porque muchas de las cosas que la Biblia nos dice que ocurrirán ya han sucedido. Cuando Dios cumple lo que la Biblia predice, tenemos una prueba concreta y palpable de que la Biblia y sus profecías son ciertas.
El libro de Números del Antiguo Testamento lo deja claro:
"Dios no es hombre para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta. Él dijo, ¿y no lo hará?Habló, ¿y no lo cumplirá? - Números 23:19
4. La Biblia y la fe cristiana no tienen ningún rival que pueda ayudarnos a entender el futuro.
Ningún otro libro en el mundo y ninguna otra religión puede predecir el futuro con antelación de la forma en que lo ha hecho la Biblia. Hay un solo Dios, y su versión de los acontecimientos es nuestra única imagen segura de lo que ocurrirá en el futuro.
Por ejemplo, Jesús predijo su propio futuro en los Evangelios:
Desde entonces, Jesús comenzó a explicar a sus discípulos que le era preciso ir a Jerusalén y padecer mucho de parte de los ancianos, de los principales sacerdotes y de los escribas, y ser muerto y resucitar al tercer día. -Mateo 16:21
Predijo su propia traición por parte de Judas (Mateo 26:21-22), que sus discípulos lo dejarían después (Mateo 26:31-32), y que Pedro lo negaría tres veces (Mateo 26:33-34). En ese mismo pasaje, Jesús predijo su resurrección.
Predijo la llegada del poder del Espíritu Santo en la vida de sus discípulos en Hechos 1:8. Él predijo que sus palabras “no pasarán” en Mateo 24:35, y aquí estamos, dos mil años después, todavía hablando de esas palabras.
Un gran número de profecías concretas de la Biblia se han hecho realidad.
5. La confirmación de la veracidad de la Biblia depende de la veracidad de sus escritos proféticos.
Si todas esas profecías que quedan en las Sagradas Escrituras no se cumplen, entonces la legitimidad de toda la Biblia está en peligro, incluyendo las afirmaciones sobre Jesucristo. Pero esto no es algo que deba preocuparnos. No hay ningún misterio, porque la verdad de la Biblia es fácil de evaluar. Podemos saber la exactitud de las profecías de la Biblia porque son increíblemente detalladas.
Las profecías sobre Israel son un gran ejemplo de ello. Ya redacté esta publicación detallando cinco profecías cumplidas que involucran a Israel. Le recomiendo que lo lea, pero aquí tiene una lista parcial de las profecías cumplidas en el último siglo:
Israel se reunifica dos veces. (Isaías 11:10-12)
Israel es reunificado desde el norte (Jeremías 16:14-15)
Israel nació en un solo día (Isaías 66:8)
Jerusalén es retomada por los judíos (Lucas 21:20-24)
Israel sigue dividido (Joel 3:1-2)
Todo esto se ha cumplido.
Una y otra vez, hemos visto a Dios cumplir las promesas y predicciones que nos dio en la Biblia. Esto nos ofrece una prueba concreta y medible de que la Biblia y sus profecías son ciertas.
Estos son días extraordinarios y emocionantes en los que vemos, en nuestra generación, cómo Dios está cumpliendo lo que prometió en las Sagradas Escrituras.