La Realidad del Infierno
Para conocer las buenas noticias del Evangelio, hay que entender las malas
Como pastor, me han preguntado antes por qué hablo tanto de la eternidad. Sea cual sea el tema sobre el que estoy predicando, mis mensajes siempre parecen volver a nuestro destino eterno. ¿Por qué? Es porque, a la hora de la verdad, nuestra eternidad es lo más importante que existe. Enseño la Palabra de Dios porque quiero ver que las personas que iban camino del infierno lleguen al cielo. Quiero que la gente cambie su dirección eterna.